Volar el 31 de diciembre: ¿alguna vez has tomado las uvas en un avión?
Si planteamos esta pregunta en el titular de nuestro último post del año es porque, efectivamente, muchas personas tienen que volar el 31 de diciembre, viviendo esta particular experiencia. Sobre todo cuando se trata de vuelos transoceánicos de larga duración en los que el cambio de año se produce en pleno vuelo.
¿Te has preguntado qué ocurre en esos casos? ¿Se celebra la llegada del Año Nuevo? ¿Se toman las 12 uvas en el avión? ¿Y si se viaja a un lugar con otro huso horario, qué hora se toma como referencia para celebrar el fin de año, la del país de origen o la del país de destino? Pues hoy despedimos nuestro año editorial haciendo un homenaje a todos los viajeros que han vivido esta situación en algún momento de su vida.
¿Te toca volar en Nochevieja?
Volar el día 31 de diciembre no es algo que se suela planificar con mucho entusiasmo, pero a veces, la necesidad o la casualidad te llevan a pasar una de las noches más especiales del año en un avión. Ya sea porque no quedan otras fechas disponibles, porque tienes que trabajar el día 1 de enero o porque ese día los billetes suelen costar un poco menos, la experiencia tiene algo de surrealista y, a la vez, de fascinante.
Una de las primeras preguntas que suelen venir a la cabeza ante la idea de volar el día 31 es: ¿cuándo se cambia exactamente de año si, por ejemplo, estás cruzando el Atlántico? A bordo, los husos horarios pueden ser más imprecisos y no permitir que se sepa exactamente en qué momento concreto se cambia de año.
En la mayoría de vuelos en ese día, el comandante suele avisar por la megafonía del avión, especialmente en vuelos largos, pero la realidad es que no hay una única hora en la que todos den por comenzado el año: para algunos lo será porque ya lo es en el país del que salen, y para otros será 1 de enero si ya lo es en el país al que llegan. En cualquier caso, lo cierto es que, en pleno vuelo, es difícil precisar el momento exacto del cambio de año.
¿Se suelen tomar las uvas en un avión?
Ahora bien, la pregunta que más se hace a quienes han vivido esta experiencia es: ¿se toman las 12 uvas en un avión? La respuesta es… a veces sí y a veces no.
Las aerolíneas no suelen organizar una celebración formal, pero el ambiente a bordo cambia cuando llega la medianoche. Algunos pasajeros se preparan y sacan sus uvas de la maleta de mano, otras personas brindan con refrescos o botellas de vino y champán del servicio a bordo, y siempre hay quien aplaude para darle un toque festivo al momento.
Respecto a las uvas, no hay que olvidar que la tradición de tomar las 12 uvas es española, de ahí que sea más frecuente que se produzca, aunque sea de forma improvisada, en vuelos que parten o llegan a España. En otras aerolíneas o rutas puede que no se tomen las uvas.
Curiosamente, el 31 de diciembre no es un día con menos vuelos. Los aeropuertos siguen operando a pleno ritmo, y muchas tripulaciones están acostumbradas a recibir el año nuevo a miles de metros de altura. Para ellos, esta noche no es distinta de otras: profesionales que garantizan un vuelo tranquilo, aunque sea un poco más especial para los pasajeros, que como te contamos, muchos decidirán celebrarlo y tomar las 12 uvas en el avión.
La reflexión final es que volar en Nochevieja tiene algo mágico y algo surrealista. La mayoría de las personas vivimos esta noche en compañía de familiares o amigos en una casa, en un restaurante… pero pocas personas pueden contar que la han vivido en un avión. Sin duda, una forma de comenzar el año diferente, lejos del ruido de las celebraciones tradicionales. En el fondo, quizás sea una señal para comenzar realmente una nueva vida con el nuevo año.
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Y ya solo nos resta desearte unas Felices Fiestas y un Próspero Año Nuevo (lo celebres o no a bordo de un avión).